Viajes

Viajes · 23 enero 2016
Así empezó todo, dos años atrás... Un cuenco con unos granos de arroz integral, unas semillas de sesamo, un te bancha caliente, palillos... Un plato completo para dejar descansar tu cuerpo, una masticación consciente para digerir cada granito de arena de tu día a dia, una meditación semilla a semilla hasta conseguir hacer líquido lo sólido y masticar el líquido. Tu también puedes sentir sus beneficios. María de la Bodega Macrobiótica ¡Feliz día!